Cuantas aventuras habrá vivido La Desertora desde que abandonó el ejercito hasta que vino a España a disfrazarse de moto de carreras antigua para no ser reconocida. Al igual que en los 80 los desamparados contrataban al Equipo A para poder solucionar sus problemas más turbios, esta Triumph TRW 500 se puso en contacto con CRO para cambiar por completo su imagen, no ser reconocida y cobrar una nueva vida.
La moto siempre ha sido símbolo de libertad y eso es lo único que quiere La Desertora, ser libre, al igual que un pájaro nunca debería de estar en una jaula, una moto nunca debería estar en el ejército, aunque seguro que más de una vida han salvado, no sabemos si es el caso de esta TRW. (La W=War). Lo que si sabemos es que ahora se siente libre y cada vez que salga a rodar lo hará sabiendo que si alguien en algún momento la sigue por detrás, seguro que sólo tiene la intención de adelantarla par a dispararle una foto y no una bala.
A día de hoy es el proyecto más especial de esta brigada de constructores que no hacen más que ganar batallas en tiempos de guerra. Para esta ocasión han contado con el comandante en jefe Ángel de la Maza, más que conocido en el sector de las motos clásicas y sobre todo en las de nacionalidad británica. Larga vida a la desertora y larga vida al CRO. Si quieres verla en vivo y en directo pásate esta noche por el Kike Keller en Madrid. Más info en CRO.
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