Hay lugares que están predestinados a actuar de catalizadores para determinados impulsos. Uno de ellos es sin duda el Tourist Trophy y concretamente los Pubs que bullen de pasión y pintas en la isla en época de carreras. En uno de ellos Jim se apostó unas pintas con su colega a que podía volver a pisar la Isla con una Triton de 10. Y como Jim es un hombre de palabra y para que no hubiese ni la más mínima duda acudió a Made In Metal Motorcycles, uno de los mejores preparadores de Café Racers del Reino Unido. El resultado salta a la vista, impecable. Neil Adams, el dueño de MMM, ha conseguido crear una de las Triton, con motor de Triumph T150 y chasis Manx featherbed Wideline en acero ultraligero, más espectaculares de los últimos tiempos. Es lo que tiene trabajar con carta blanca, sin tope de presupuesto. Si quieres saber más de esta belleza pásate por The Rider´s Digest.
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